sábado, 21 de julio de 2007

Jazz man
Hay algo que siempre, siempre me ha gustado hacer...a la salida del metro de ciudad universitaria, cerca de las siete de la noche, hay una atmosfera que, aveces tiende a ser muy cortazariana y parisina. El aroma a frio, a buhonero, a hippies a gente pregonandote pulseras, bufandas, en medio de una esperanza de vida, me hacen pensar en la remota posibilidad de que aun exista una esperanza, para esta ciudad tan convulsionada, y con ciertos visos de decadencia...Hace unos dos dias algo ocurrio; el sonido magico de un sax, irrumpiendo en la (curiosamente) fria noche caraqueña, hizo que mas de una persona detuviese el tiempo, y se sintiese libre, se sentase a pensar...a sentir tal vez. Sin preocuparme mucho, por las inmediaciones de un futuro, que por sus prisas no me deja concentrarme en lo abstracto que pueda tener el tiempo, me sustraigo de mi, del olvido, de mi preocupacion por no reprobar Morfosintaxis, y aun consciente de que, arrastraba a ese vacío, al compañero de clases que iba caminando conmigo, terminé por sumergirme en lo que mas tarde ese compañero y yo llamariamos "divino". Tocaban Bésame. no pude resistirlo, la imagen de aquel hombre negro, interpretando esa melodía me hizo recordar muchas cosas. Me hizo recordar a Daniel, a Alberto (sin ofensas para ninguno de los dos, es q fue poeticamente literario la conjucion de sus vidas entonces) recordé, tambien esa epoca en que mamá aun sonreía al ver a papá, recordé muchas cosas...pero principalmente, a Julio, cada imagen, cada sonido me hizo vivir, ese momento cortazariano de la mejor manera posible. Le di un nombre: Johnny's Night. le hice una historia. Impulsada por un rapto momentáneo, me acerco, y le pido que toque (con los nervios, con la duda de si lo hará o no). Le pido el tango que mas me gusta: "La noche en que me quieras". Accede. Mi amigo no quiso hablarle, dice que no es capaz de hablarle a los dioses.No me importa.Disfruto esa cancion, me gusta mucho, a pesar de que cada vez que la oigo, una herida distinta vuelve a reabrirse en mi alma. palabras. al culminar la cancion, y luego de haberme convencido que era genial, que era bueno sentirse la Maga por lo menos por un rato, me levanto, aplaudo, le doy las gracias, le digo adiós, con la suficiente fuerza para escribir esto, que, no es mas que el preludio al cuento Jazz Man. Caminando, esa noche, de ese 13 de Diciembre, me doy cuenta que siempre es bueno, caminar por el lado oscuro de la luna